Los reyes magos pueden llegar en muchas formas. No solamente en una ilusión cada año, ni en llega en forma de juguete o alguna cosa material. Puede llegar en forma de buenos sentimientos, de ganas de querer hacer algo mejor por algo o alguien. En forma de un bello recuerdo que anhelamos vuelva a hacerse realidad aunque sea por un segundo. Esta es una ocasión de esas. Me alegra y me llena de ilusión que sigas creyendo en los reyes magos. A lo mejor no eran ni reyes ni magos sino personas con dinero y muy sabias. El dinero no compra la felicidad ni el saberlo todo provoca inmortalidad. La esencia que deja cada una de las personas con la que nos topamos a lo largo de esta historia es la que nos hace felices e inmortales. Este presente no tiene ningún valor monetario, ni siquiera un recuerdo para el 99% de las personas que verán estas imágenes, pero con que una persona exprese una risa o una tristeza, es cuando se le da el mayor de los valores a todo lo que tratamos de hacer.
Los reyes magos somos todos, los dadores de felicidad somos todos, los que decidimos como vivir la vida somos cada uno.
Feliz día de reyes. Feliz vida
